PALABRAS
DEL PROFESOR GILBERTO JESUS PIÑEDA
BAÑUELOS EN LA CEREMONIA DE CLAUSURA DE
LA GENERACIÓN 2010-2013 DEL COLEGIO DE CIENCIAS Y HUMANIDADES
INCORPORADO A LA UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO, CONOCIDA DESDE 1960
COMO LA PREPA MORELOS O ESCUELA PREPARATORIA JOSÉ MARÍA MOREOS Y PAVÓN.
Buenos días a todos
y a todas.
Hoy es viernes 28
de junio de 2013 y Bertha me avisó que las egresadas y los egresados habían acordado que daría un
mensaje a nombre de la profesora Cecilia
Cristerna Davis y a nombre propio, en nuestra calidad de padrinos de esta
generación. Por lo tanto, con mucho afecto y cariño, este es un mensaje
a nombre de los padrinos de la generación dirigido a los egresados y egresados,
a sus padres y al resto de sus familias que estuvieron cerca de ellos y ellas,
apoyándolos en esta etapa se su vida… Por su egreso, les deseamos lo mejor y queremos que reciban todos y todas, una
felicitación y un fuerte abrazo de parte de la profesora Cecilia y de mi parte.
Sin embargo, quiero
pedir disculpas anticipadas, porque no sabía si era pertinente decir unas
palabras personales y he decidido que si las diría; tampoco sabía si habría que
decirlas verbalmente o había que escribirlas, decidí escribir unas palabras que quiero leer ahora,
si me lo permiten.
A lo que escribí le
he puesto un título acorde con el evento… digo acorde, porque este evento es de
las egresadas y de los egresados… el escrito se llama, en plural:
¿Y USTEDES QUÉ, YA NO VAN A VENIR A LA
ESCUELA?… CABRONES (AS)
Empiezo: en las
clases que uno imparte, por lo menos algún alumno o alumna, no asiste, y creo
que ya han pasado bastantes generaciones que me han escuchado decir esta frase
y la respuesta inmediata que recibo en la siguiente clase de quienes faltaron a
la clase anterior, cuando les pregunto: “¿Y
tú qué, ya no vas a venir a la escuela?” …
la respuesta inmediata es: “si la única clase que he faltado fue la
pasada”… y esa es la historia… pero esa
historia termina este día… aquí termina, porque ahora la respuesta de todos y
todas es que ya no van a venir a la escuela, porque han egresado, aunque
algunos y algunas tendrán que pasar sus extraordinarios para que todo termine
bien; aunque ella la escuela, los va a extrañar, y a mí me parecer que ustedes
también la van a extrañar…
Pero no solamente
ustedes egresan, resulta que me escogieron como padrino, junto con la profesora
Cecilia, justo en la generación 2013 cuando yo también egreso después de más
de 41 años de haber estado en las aulas, en los pasillos, en las canchas, en el
estacionamiento, en las mantas, en los manifiestos,
en la calle, en los plantones, en las huelgas, en la academia, en el Rodeo, en
la antigua carpintería, en contabilidad, en difusión, en control escolar, en
los cubículos, en apoyo académico, en la copias, en el almacén, en la dirección
y la subdirección; en los laboratorios aunque sea para pedir los “Metros de
madera” para trazar murales; en la biblioteca, y una que otra vez en el Twinky; en los baños, en la bodega con
los compañeros intendentes; y por supuesto en el taller y en las bardas… pero
también en el aula A…
Ustedes no van olvidar
el aula A, porque en la prepa Morelos nunca hemos tenido Auditorio, y ahí se
pasan películas, se dan conferencias, se hacen exposiciones, se pintan los
macroesténciles, se hacen reuniones de padres de familia, convicios escolares,
reuniones sindicales, y todo lo que se
les ocurra…. pero yo tampoco voy a olvidar el aula A, porque tres meses después de haber egresado de la
carrera de arquitectura, un día de noviembre de 1971, no me acuerdo que día,
empecé, con 21 años y 11 meses de edad a impartir la primera clase de dibujo constructivo, por cierto con muchos nervios, como decía mi´amá: “me temblaban las canillas” cuando empezaba las primeras
clases… Dibujo constructivo, era una materia que venía en el plan de
estudios de la Escuelas Preparatorias por Cooperación dependientes académicamente de la SEP, como era la Prepa Morelos, aunque
administrativamente siempre dependió de un patronato formando por padres de
familia que tenían hijos en la Prepa Morelos… Desde entonces imparto clases… En
1973, nos pusimos tristes porque el gobierno había decidido tempranamente, desaparecer
la Prepa Morelos para implantar el
Instituto Tecnológico Regional, como se llamó, a nivel bachillerato; sin
embargo, unos cuantos profesores, entre los que me cuento, y creo que la mitad de los alumnos, no
recuerdo bien, nos opusimos rotundamente
al cierre definitivo y temprano de la Prepa Morelos; y rápidamente nos
incorporamos al Colegio de Ciencias y Humanidades, conocido como CCH, un plan
de estudios de vanguardia, crítico, científico, humanista y popular; que
integraba las ciencias y las humanidades;
que apenas tendría dos años de haberse implantado en la UNAM con la orientación de Don Pablo González Casanova
empujado por el movimiento estudiantil de 1968 y 1971, que había sido reprimido
por el gobierno en el centro del país.
Las primeras
generaciones del CCH sufrieron mucho,
pues la Prepa Morelos seguía en la mira del gobierno, y a falta de profesores y
profesoras, algunos que no contábamos con el perfil en otras materias (por
ejemplo yo había estudiado arquitectura, y sin ningún problema podía impartir Taller de Diseño Ambiental y Taller de Expresión Gráfica que en 1974
eran las nuevas materias del plan CCH que sustituyeron al Dibujo Constructivo del plan SEP), pero quienes estábamos capacitados en el área de conocimiento distinto al nuestro, se pusieron a impartir materias, como un
mecanismo de defensa del CCH; por
ejemplo, yo había leído y estudiado en círculos de estudio que se hacían en esa
época en el movimiento social, los tres tomos de El Capital de Carlos Marx, que venía en la bibliografía básica del plan
CCH, y me puse a impartir la materia de
economía por muy breve tiempo; mientras se encontraba un profesor con perfil, coincidentemente, es la materia que le impartí a la Bertha, que ahora es la Directora
de la Prepa Morelos, que por cierto después estudió la carrera de Economía en
la primera generación de la UABCS.
Si se trasladan en
el tiempo, un poco más atrás, digamos a
1960, la ciudad de La Paz era como La Paz
de Antes, prácticamente llegaba hasta
la Isabel la Católica, todos nos conocíamos, y casi todos vivíamos en el primer
cuadro de la ciudad… me acuerdo que a mediados de 1960 en la calle 16 de
septiembre, me tocó decir las palabras de despedida de la primaria, pues yo
estaba en la escuela 18 de marzo, y a un costado había un callejón por donde
subíamos a la calle independencia y en la esquina con la Belisario Domínguez estaba la oficina
de obras públicas donde trabajaba Raúl Piñeda Chacón como dibujante, o sea mi´apá, y meramente en frente, donde
ahora está el Cheve and Music, estaba un edificio que por el estilo que
tenía, parece que fue construido durante la década de 1940, esa era la
secundaria Morelos, donde me inscribiría en el primer año B, eso fue en septiembre de
1960; pero al mes siguiente, en octubre, en los salones de la secundaria
Morelos por las tardes, empezó la vida
de la primera generación de la Escuela Preparatoria José María Morelos y Pavón…
esa Prepa Morelos es la misma Prepa
Morelos de la que ahora egresan ustedes y de donde egreso yo, en este 2013,
porque me retiro junto con ustedes, yo al concluir un largo ciclo de vida,
acumulando juventud de 15 en 15 (pienso llegar al menos hasta los 90 años, o
sea seis de 15 , ahora tengo cuatro de 15 más 3, a ver si puedo llegar… espero que sí); y
ustedes a continuar varios ciclos de vida, empezando por sus estudios
universitarios o a continuar lo que la
vida les permita hacer en los próximos años… sea como sea…Todo va a salir
bien…Ya verán.
Terminé la
secundaría en 1964, y en ese mismo año ingresé a la preparatoria Morelos, por
la tardes, porque eran los mismos salones de la secundaria Morelos en la mañana,
pero el edificio ya estaba en la esquina
de 5 de febrero, que por cierto era un gran arroyo, entre la carretera al Sur y la carretera a Las Garzas,
cómo le llamábamos a los Boulevares de ahora, era así, porque en la práctica la
ciudad seguía siendo la misma ciudad de La Paz de Antes, cuando digo La Paz de Antes, digo la de nuestros padres y abuelos de mi generación… Y
justo esas eran las salidas de la ciudad. Como no había Universidad, ni Tecnológico,
pues la máxima casa de estudios era la Benemérita Escuela Normal Urbana; en
1966, egresé de la prepa y mis padres me empujaron a seguir mis estudios universitarios,
no me obligaron porque yo también quería
seguir estudiando; pero como suele suceder a esa edad, primero quería ser
educador(a) como mi´amá, pero en la Normal solo se permitían educadoras; después
quería ser arquitecto, como fui, siguiendo los paso de mi´apá, pues era dibujante de planos y rotulista; aunque a decir verdad, no siempre nuestras familias pueden, pero
hacen enormes sacrificios; porque estudiar la Universidad, es, por decirlo de
alguna manera, ostentosa, aunque se diga que la educación es pública; mi madre
era educadora que trabajaba para la SEP y mi padre era dibujante que trabajaba
para el gobierno del entonces territorio;
ellos tuvieron la posibilidad de sostenerme hasta el final, aunque con muchos
sacrificios, porque a mi´apá, le
gustaba mucho pistiar; fue el caso
que desde tercer año de Universidad tuve que trabajar, y mi hermana menor, mi
única hermana, que empezó a trabajar de secretaria,
me enviaba algún dinerito de vez en
cuando a Guanajuato… No siempre se puede, para que lo sepamos. A mí me
quedó claro que Chayito y Raul, mis padres y la Ope mi hermana, pudieron
sostener mis estudios, hasta que terminé la carrera de Arquitecto en 1971, y
desde entonces estoy en la Prepa Morelos, esa Prepa Morelos que ya es de ustedes,
es mía, es de todos y todas, por eso la queremos y la defendemos, hasta las
últimas consecuencias… Se los pido que así sea, estén donde estén.
Quiero darles un abrazo
fuerte a todas y a todos, hayan sido mis alumnos o no hayan sido… Esta
generación es especial para mí y les agradezco, como se los agradece la
profesora Cecilia, habernos seleccionado como sus padrinos, pero además, yo quiero llevarme la sensación de que la
generación 2010-2013, juntos se les ocurrió hacer un mural, como los que hacen en mi clase las y los alumnos del taller
de Diseño Gráfico del segundo semestre, pero en especial quiero hacer mención
este día de quienes a nombre de ustedes, imaginándomelo así, buscaron una foto
no sé dónde, la digitalizaron en formato stencial, lo dibujaron, lo trazaron y
lo pintaron… con todo y frase completa, o sea con el CABRÓN…. Un abrazo fuerte
a la Mónica, al Raffa, al Puppo, al Carlos o sea al Greñas, a la Alondra o sea a la Xel-Hita
(que por cierto no me tienen tan contento por faltistas, aunque todos ellos y
ellas saben que los quiero mucho… como al resto, aunque me encabrone) y a la
Bere y a Sergio que ayudaron en el mural; pero el abrazo no es sólo para ellos
y ellas, es para todos, los menciono por mencionarlos, aunque me gustaría
mencionarlos a todos, pero la lista es larga, y después de que pasen los
años se acordarán entre sí, como ahora
después de 47 años que salí de la Prepa Morelos traigo a la memoria a mis
compañeros y compañeras de la generación, al Cochito, al Aldo y al Pancho
(que ya fallecieron); al Micro, al Amancio
y al Camaley que son mis colegas en
la Universidad; al Tin, al Rafa, al Galindo, al Bigotón, al Quintero, al Laga, al Venparklen, a la Graciela, a la Vita, a
la Lilia, al Villasana, al Castro, al Luis, al Bermúdez, entre otros más.
Pero…
¿por qué les cuento
todo esto, a unos jóvenes que van a egresar de la Prepa Morelos? ¿Por qué les
cuento todo esto delante de sus padres o de otros familiares y amigos que los
acompañaron a la graduación?... si son asuntos personales.
Por la sencilla
razón de que ustedes como yo somos egresados de la Prepa Morelos, ustedes de la
generación 2010-2013, mi hija Vernna es egresada de la generación 1990-1993, y
yo, doble egresado, de la generación 1964-1966, y ahora en 2013, como ustedes… felicidades y de nuevo lo mejor y un abrazo
fuerte.
TITO